Reseña: Ataraxia

La apuesta por los autores nacionales de manga (o cómic de inspiración estética japonesa) es, por las peculiaridades del mercado español, actividad de alto riesgo. Con el próximo estreno de la línea Gaijin de Ed. Glénat parece que se van a abrir muchas puertas, pero no sería nada justo olvidar la labor de Nowevolution, editorial que, desde sus comienzos, ha tenido como objetivo el abrir un hueco a los creadores patrios. Y de entre todo su catálogo, destacaAtaraxia, shonen cuyo primer tomo, de la mano del jovencísimo Manu López, está desde hace unos meses en las librerías a la espera del lanzamiento de su segunda entrega. Una historia que atraerá, especialmente, a los habituales de videojuegos como los conocidos Ragnarok Online o World of Warcraft.

Por Nisa Arce

Un nuevo mundo donde nada es lo que parece

A simple vista, Ataraxia puede parecer un juego de rol online cualquiera, de los tantos que abundan en Japón, y que se rige por los parámetros habituales: jugadores que se crean un avatar, mapas de extensos mundos, perfiles profesionales a los que adecuarse, cientos de enemigos que requieren de una serie de habilidades para poder destruirlos...

Sin embargo, Kyle sabe que detrás de los de píxeles y algoritmos se esconde algo más. Es por lo que se crea una cuenta y accede al juego con una única intención: averiguar qué fue lo que llevó al suicidio a Evan, su hermano gemelo, jugador habitual de cierta reputación.

Kyle comienza su andadura valiéndose de la terqueza del inexperto; aunque son muchas las nuevas situaciones a las que debe aprender a enfrentarse, su determinación por averiguar el por qué de la fascinación de su hermano le llevará a unirse a Sue, una jugadora de armas tomar que, además, parece haber mantenido un vínculo especial con el desaparecido Evan, yHugo, un poderoso mago que no duda en unirse a ellos, formando un trío de lo más singular. Los tres comenzarán sus andaduras conjuntas, dispuestos a compartir emociones fuertes a la vez que tratan de resolver el enigma planteado por Kyle.

Un estilo propio construido en base a fuentes niponas

La lectura de las primeras páginas deAtaraxia resulta chocante por su estilo de dibujo un tanto simple y el empleo abusivo de trazos de rotulador para crear sombras y texturas, así como la morfología y expresiones de sus personajes, también bastante sencillas. Sin embargo, ya a mitad del cómic puede apreciarse una importante evolución en la destreza del autor, cuya madurez artística empieza a despuntar en los últimos coletazos del primer tomo, sin renunciar a sus sellos de identidad: se mantienen los trazos gruesos que definen personajes, pero estos tienen movimientos más fluidos; el sombreado a base de rotring sigue teniendo un papel importante, aunque está depurado y queda bonito a la vista. Sin duda, lo más importante es que se consigue un conjunto original que, pese a la evidente herencia del cómic japonés, con empleo de los conocidos SD (Super Deformed) y apariencias kawaii, o la estética de los videojuegos asiáticos a los que se rinde tributo, conforma un universo propio, creíble y esperanzador, ya que trabajos posteriores de Manu López (como su historia en el fanzineSupeinGO!, la cual a continuación se mencionará), demuestran que lejos de quedarse estancado, se esfuerza por seguir mejorando. Así que con el tomo uno de Ataraxia ha formado una expectativa que, esperamos, se verá cumplida con futuras nuevas entregas.

Joven promesa con mucho camino por delante

Manu López (conocido también como Ku o Kuroudi), es un joven onubense de veintidós años que gracias a su estilo desenfadado y fresco se ha hecho un hueco en el panorama del cómic en España con Ataraxia, su primera publicación a nivel profesional. Sin embargo, ha colaborado con varios fanzines aportando historias cortas, destacando Asalto al Expreso hacia Ciudad Esmeralda, cuya primera entrega vio la luz en el número uno deSupeinGO!

Un shonen bastante original, aunque focalizado

El punto fuerte de Ataraxia (su planteamiento) tiene, a pesar de lo novedoso, un gran inconveniente: el que la historia transcurra dentro de un videojuego y tanto la jerga como la forma de interactuar de los personajes se corresponda a lo habitual en esta clase de productos, supone una traba para que las personas que no estén familiarizadas con el mundillo puedan disfrutar del cómic en sí. Se han empleado vocablos habituales comoparty, levear o guild, así como gags como el que los personajes se sienten para recuperar energías (el chascarrillo que se produce cuando Kyle, novato, no comprende el comportamiento de sus compañeros pierde su gracia si se desconoce el por qué); si bien se compensa con el glosario de términos disponible al final del tomo, esto hacen pensar que la obra en sí quizás está destinada a un público muy determinado.

Pese a todo, Ataraxia reúne los ingredientes indispensables de todo shonenque se precie: personajes atractivos, acción, aventura, muchos secundarios y, cómo no, una pizca de romance para aderezar el cóctel. El tiempo será el único que dirá si Ataraxia, cuando se haya terminado su publicación, se convierte en una buena serie y, sobre todo, en una muy buena primera obra. Base no le falta. Ojalá que el trabajo de Manu López consiga atraer a más público y mantener su interés paulatinamente.

En cuanto a la edición, Nowevolution apuesta por el formato que parece haberse convertido en el habitual para la editorial: tapas blandas, sobrecubierta a color, tomos de un tamaño superior al del manga corriente, aunque bastante más finos y una calidad de impresión correcta, aspectos que irán mejorando si el aficionado apoya a la cantera del cómic español de inspiración japonesa.

Lo mejor: La historia es muy original y hará las delicias de jugones y, por qué no, de los que convivan con jugones.

Lo peor: Es un tanto irregular en cuanto al dibujo: los primeros capítulos flojean, pero el nivel va subiendo hasta alcanzar un nivel más que aceptable.

Ficha técnica:
Título: Ataraxia
Título original: Ataraxia
Guión: Manu López
Dibujo: Manu López
Editorial española: Nowevolution
Formato: rústica con sobrecubierta, 127 páginas B/N
Precio: 6,50 €
Nº de tomos en español: 4 (por el momento sólo se ha publicado el 1)