Como en la final de la edición 2013, el Wigan dio la sorpresa ante el Manchester City y nuevamente le ganó en la FA Cup, esta vez en los cuartos de final y se aseguró un lugar entre los cuatro mejores del certamen del certamen más antiguo del mundo.
Tardó en acomodarse el elenco de Manuel Pellegrini y lo pagó caro. En el Etihad Stadium el local le regaló 60 minutos y dos goles al visitante, cuando despertó ya era demasiado tarde pero igualmente pudo empatarlo y forzar un segundo encuentro.
A los 27' del primero tiempo el Wigan se puso en ventaja a través de Jordi Gómez, quien de penal abrió el marcador tras una infracción de Martín Demichelis. En el comienzo del complemento, James Perch estiró la ventaja y parecía que todo estaba definido, ante la imagen opaca de City.
Sin embargo, Pellegrini empezó a meter mano en el equipo, decidió el ingreso del español David Silva, Edin Dzeko y James Milner todos en el mismo momento y el partido cambió. El local se volvió más ambicioso y fue en busca del milagro.
A los 68' el francés Samir Nasri tomó un rebote en la puerta del área mayor y con un violento remató marcó el descuento. El City comenzó a arrinconar a su rival y jugó 20 minutos en la cercanía del arco visitante, contó con varias situaciones para igualar el encuentro pero no lo consiguió y quedó eliminado.
Ahora Wigan se enfrentará con el Arsenal en la semifinales que se disputarán en el mítico estadio de Wembley. La otra llave la animarán Sheffield United y Hulk City.
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